Microrrelato Sara Sánchez

 

Microrrelato

Jueves por la tarde, paseaba por el centro de la ciudad camino de la biblioteca para someterme a otra tarde de estudio cuando, de pronto, lo vi. Un espléndido vestido me llamaba desde el escaparate. Después de tanto tiempo buscándolo, por fin, lo había encontrado, era ese, parecía diseñado especialmente para mí, cumplía todas mis expectativas, era perfecto. Sin perder un segundo, entré como un rayo en la tienda. Una dependienta joven y alegre se acercó a mí con una sonrisa. Le pregunté por mi vestido, era mío, y tras probármelo me fijé en la etiqueta que colgaba de él. Un vacío me inundó, era caro, demasiado caro, necesitaría la paga de varias semanas para poder pagarlo. Deprimida, le di las gracias y me marché. Tras varias vueltas por la ciudad, finalmente no fui a la biblioteca. Después de algunas semanas ahorrando cada céntimo que caía en mis manos conseguí reunir el dinero. Volví a la tienda deseando que siguiera allí y lo compré. Camino a casa iba soñando con el momento de ponérmelo. Estaba tan emocionada que sentía que flotaba en el aire. Llegué a casa y lo guardé con mimo en el armario. Al fin llegó el ansiado día, por fin iba a ponérmelo, corrí escaleras arriba y vi a mi hermana quién me miraba con terror en los ojos. Llevaba puesto mi vestido y estaba roto. Ira, furia, rabia, lo veía todo rojo. De repente sentí que me transformaba. No gritaba, rugía, no tenía manos, sino zarpas. Mi único objetivo, destruir.

                                                                                          Sara Sánchez 1º BACH A